En la búsqueda del equilibrio interno

Luciana Leite da Silva

Nacida el 1 de abril de 1971 en Brasil, Cachoeiro de Itapemirin (Cascada de Piedra pequeña), Luciana Leite Da Silva nos cuenta que desde pequeña su sueño eran venir a Europa. Aquí, dice que se ha reencontrado con gentes que ya conocía de otras vidas. Ha sido un periplo largo a través de Alemania, Noruega, Italia, Portugal, España (Tenerife, Alicante, Oviedo, Jaca,...) donde “Muchas escenas y rostros que he vivido durante estos ocho años, ya los había soñado de niña”.

Luciana lleva unos meses practicando yoga en el Centro Sananda de Jaca. Le preguntamos sobre su experiencia:

¿Cual ha sido la motivación para acercarte al yoga?

Los dolores del alma que también me han traído dolores en mi cuerpo. Sobre todo quiero que mi mente deje de pensar tanto! Comprendo que mi mente hiperactiva influye negativamente en mis emociones y en mi cuerpo, pues todo es una misma cosa. Todo esto lo comprendí hace mucho tiempo, pues ya con quince años tuve curiosidad por estudiar la medicina holística, y las terapias llamadas alternativas.

Estuve en tratamiento psicológico y empece a buscar mi YO. No existe la casualidad, así que por alguna causa, nada mas llegar a Jaca vi el cartel de Yoga de Sananda y me dije, este es el sitio. Ya antes había pedido al Universo que me pusiera en el Camino para conseguir mi equilibrio. Ahora todavía me siento una mutante de la Naturaleza Negativa que rodea el mundo, me queda mucho por recorrer.

¿Qué otras practicas has realizado en estos años de búsqueda?

Luciana, realizando la cobra en primer plano

Luciana, junto a sus compañeras de clase

Siempre he sido curiosa y observadora. Todas las circunstancias de la vida me han llevado hacia el mundo holistico y he estudiado reflexoterapia, mesoterapia, acupuntura, shiatsu, auriculoterapia, reiki I, lectura de Registros Akasicos, meditación, etc. y ahora pienso en hacer un retiro para alejarme del ruido de la vida diaria y encontrar la paz y calma que siempre busco. Me han recomendado ir con los monjes de Panillo.

¿Cómo te sientes desde que practicas yoga?

Me siento mejor, pero me queda mucho, estoy aún en la fase de bebé. Si no acudo a alguna sesión de yoga, me duele todo. Ya me he hecho “adicta” al yoga. Además en clase siento buena energía, siento paz, seguridad y amabilidad de parte de todos. También siento intención verdadera de lograr el crecimiento continuo en cada persona. En realidad me siento como en casa, ya que mi familia carnal está muy lejos.

Gracias por  compartir  la experiencia! Desde aquí deseamos toda la fuerza para que Luciana encuentre ese equilibrio que tanto busca en su vida. La practica diaria y la fe puesta en una meta dan todo lo necesario para llegar o, mejor dicho, reconocer que la paz que tanto ansiamos ya está en nuestro interior desde siempre.
Paz para todos!